La Asociación Parkinson León comenzó su andadura en el año 2006, por aquel entonces con el nombre «Asociación Parkinson San Marcelo»  puesto que este santo es el patrono de la ciudad de León.  La entidad se inicia con un grupo de familiares y afectados cuya idea  era encontrar un espacio para poder compartir vivencias, respaldados desde el Centro de Día León II. Una vez creado el grupo inicial, se redacta el acta fundacional y a partir de ahí comienza la aventura de llevar a cabo los trámites legales para inscribir a la asociación en los registros pertinentes. Surge la necesidad de un logotipo identificatorio y uno de los socios fundadores (nuestro Antonio Fernández) presenta una propuesta que es aprobada por unanimidad. La imagen en cuestión representa un árbol, cuyas ramas serían la población y el tronco se asemeja con un león que sustentaría el crecimiento del árbol. Esa fue la imagen inicial y de los primeros pasos de Parkinson San Marcelo.

Cuando se produjo un cambio en la directiva, se estudió la posibilidad de un local propio como sede, ya que el estar en un centro de mayores era una traba para la población más joven a la hora de acercarse a la entidad y formar parte de ella.  Otra medida a valorar fue la posibilidad de un cambio de nombre, ya que el «San Marcelo» podía dar imagen de entidad vinculada con el ámbito religioso. Se iniciaron los trámites para el cambio que se aprobó en diciembre de 2011 y aprovechando ese cambio también se encargó a una ilustradora (Julia Velázquez) una imagen más actual, con el tulipán, símbolo de la enfermedad de parkinson, como premisa.    Nos creó un logotipo con tres tulipanes rojos y un fondo azul, destacando el nombre en letras azules y enmarcado en un tono verde acorde con los tallos, en versión horizontal y vertical.

                     

Paralelamente estudiamos la necesidad de llegar a un ámbito mayor de población, y de forma voluntaria la hija de uno de nuestros usuarios (Eva Morato) se puso manos a la obra para crear de forma altruista una página web a través de la cual pudiéramos llegar un poquito más allá de lo que lo hacíamos únicamente de forma presencial.  Ella (junto a Pablo) fue la encargada de darle forma y llevar su actualización durante años.

En dicha página aparecía una versión personal del logotipo original, con los tres tulipanes y las letras en negro y rojo.

En el año 2021 accedimos a una subvención de la Fundación Banco Santander para realizar mejoras en el ámbito digital de nuestra entidad, y acudimos a Nubedocs, que además de crear una página web mucho más actual (dinámica, fresca, con buena visibilidad, variedad de imágenes e información…) y desde allí también le dieron un toque personal a nuestro logotipo.  Aunque son cambios mínimos, sí que son visibles y tienen su explicación: los tulipanes rojos que parecían gotas de sangre han pasado a un tono un poco más suave y han comenzado a abrirse, el fondo azul que se asocia con sanidad se convierte en verde, como la esperanza. Y las letras tratan de ser similares al logotipo de Pablo con alguna pequeña modificación.

Cada logotipo tiene detrás una historia y el agradecimiento a las personas que forman parte de la misma. Es vital no estancarse y con este logo y esta nueva página comenzamos nueva etapa.

Esperamos que os guste el cambio, a nosotros nos encanta.